BICICRÍTICA: ENERO SIN CUESTAS PERO ASFIXIADOS

Madrid.- El próximo jueves día 27 de Enero se celebrará, como cada último jueves de mes, la Bici Crítica (www.bicicritica.es), un paseo en bicicleta que con el lema "usa la bici a diario, celébralo una vez al mes", recorrerá algunas de las arterias más importantes de la capital, esperando superar los 2500 participantes.

Debido a que los usuarios de la bicicleta en ciudad se ahorran dinero en sus desplazamientos, y que con las bicicletas actuales las cuestas se pueden superar sin problemas, la temática de este mes es "Enero sin cuestas, pero asfixiados". Asfixiados por que los altos niveles de contaminación en el aire de la capital son habituales, y por que la famosa boina de humo negro que se puede observar muchos días sobre la ciudad, forma parte ya de los signos de identidad de la capital junto al el oso y el madroño.

El año 2011 comienza pero ni el ayuntamiento, ni la comunidad de Madrid siguen sin creer en la movilidad ciclista como una herramienta para disminuir los altos niveles de contaminación existentes.

Se podría reducir los niveles de contaminación dentro de la ciudad con diversas medidas:

-         Restringiendo el tráfico en los días de mayor contaminación, o limitando la circulación a días alternos según matrículas pares o impares.

-         Creando zonas de bajas emisiones.

-         Reduciendo la velocidad de entrada al centro.

-         Cobrando peajes disuasorios para acceder a la capital.

-         Aumentando la capacidad de los transportes públicos, con más líneas de autobuses y con mayor frecuencia de paso.

-         Dotando a la ciudad de una red de carriles bici útiles para utilizar la bicicleta como medio de transporte, no pensados para el ocio. Dicha red debe llegar a todos los barrios, y unir poblaciones cercanas.

-         Penalizando a quien contamina, como por ejemplo a las comunidades de vecinos con caldera de gasoil o carbón.

Pero el ayuntamiento (que pretendía que la ciudad fuese sede de los JJOO) lo que va a hacer es:

-         Pedir una moratoria de aplicación de la directiva europea que limita los niveles máximos de contaminación. Medida que parece poco probable que sea aceptada desde Bruselas, ya que perjudicaría la salud de los habitantes que viven en ciudades ya muy contaminadas, y no valora el esfuerzo realizado por ciudades que si han tomado medidas efectivas. A todo esto hay que añadir que dicha normativa ha recibido críticas por ser poco exigente, debido a que estudios médicos recientes realizados en España, indican que los niveles de contaminación permitidos por esta directiva, causan problemas muy serios de salud en un porcentaje alto de la población.

-         Lanzar planes como “Madrid Compensa”, en el que una empresa puede contaminar todo lo que quiera si a cambio planta árboles.

-         Construir carriles bici en las aceras, quitando espacio al peatón, y creando una red mínima e inconexa, inútil para la mayoría de los desplazamientos en bici.

Mantener los niveles tan altos de contaminación afecta sobre todo a la salud de las personas con problemas respiratorios y a los colectivos más expuestos, como pueden ser los policías municipales, agentes de movilidad, y servicios de limpieza entre otros. Estos trabajadores pasan muchas horas al día en la calles muy cerca del tráfico motorizado, respirando el aire con más concentración de contaminantes.

Hay que recordar que muchos madrileños en sus desplazamientos usan el transporte público o van andando, hay unos pocos que utilizan la bicicleta, pero hay otros que utilizan el coche por que no tienen otra opción o por que no quieren renunciar a ello. El resultado es que es el mismo aire el que respiramos todos, y dicho aire no cumple el mínimo exigido. Se debe dar facilidades a otras opciones menos contaminantes y penalizar las que más emisiones producen.